sábado, abril 15, 2006

ULTIMAS SEMILLAS ANTEDILUVIANAS

Llovía un verde augurio de triunfo,
las raíces se abrían reiventando el mundo
eran el mundo
pero alguien dijo: en el principio está el fin.
El verde era tan verde que nuevas manos
bajaron a la tierra y desde la tierra
miraron entrelazadas buscando el cielo.

Llovía porque había que comer

dijo otro, y porque las manos son pala
y son plato y porque cavaron hacia abajo
y también hacia arriba, y entonces llovía.

Pero en el principio ya estaba el fin:
quien mira desde arriba sólo ve lo oscuro,
y allí estaba el gran círculo vicioso
negro como la lenta agonía de la tierra,
y entonces ya no dejó de llover.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Cualquier palabra que agregue va a romper la atmósfera de lo que acabo de leer en este poema, pero no podía dejar de manifestar mi admiración. CC.